CÁMARA HIPERBÁRICA A MÁS DE 1,75 ATA PARA TRATAR LA OSTEORRADIONECROSIS
La cámara hiperbárica a más de 1,75 ATA se usa para reparar el hueso en osteorradionecrosis asegurando el éxito terapéutico.
Tras la radioterapia y durante la misma, una extracción dental, una intervención quirúrgica, una periodontitis marginal o una ulceración del tejido mucoso pueden dar lugar a heridas que no consiguen cicatrizar, y que pueden evolucionar en osteorradionecrosis. Siendo la cámara hiperbárica a más de 1,75 ATA un tratamiento eficaz y seguro.
Cuando un paciente se somete a terapia por radiación con altas dosis sobre el hueso de la cara y/o la mandíbula, se lesionan tanto el hueso como los vasos sanguíneos que atraviesan el periostio.
Hablamos de osteorradionecrosis cuando existe una infección crónica que provoca mucho dolor, acompañada de necrosis tras someter al hueso a una radiación intensa.
De especial interés para el odontólogo es la mandíbula, que es la zona comúnmente afectada en la región de cuello y cabeza.
La radiación provoca alteraciones que dañan los vasos de forma permanente, formando un tejido hipovascular, hipocelular e hipóxico. La cámara hiperbárica a más de 1,75ATA puede ayudar en los tres aspectos comentados.
¿Qué podemos observar clínicamente?
- Exposición del hueso
- Pérdida de la integridad de la mucosa
- Hipersensibilidad o molestia
- Parestesia y anestesia
- Mal sabor
- Infección secundaria
- Fístula
- Fractura mandibular
¿Qué observamos a nivel radiológico?
- Osteólisis del fragmento óseo
- Bordes mal delimitados (en forma de sacabocados)
¿Y a nivel histológico?
- Fibrosis y obliteración de los vasos sanguíneos
- Endoarteritis
- Periarteritis
- Hiperemia
- Pérdida celular
- Hialinización
- Trombosis
- Hipovascularización
- Ausencia de osteoblastos y destrucción de osteocitos
¿Qué hace la Cámara Hiperbárica a más de 1,75 ATA en los tejidos irradiados?
La oxigenación hiperbárica estimula la formación de colágeno gracias al aumento del rango normal de oxígeno, promoviendo la microvascularización.
Promueve la cicatrización y previene la infección combatiendo a su vez la hipoxia tisular.
Los niveles óptimos de presión parcial de oxígeno aumentan la osteogénesis y la neovascularización.
En la actualidad la terapia de Oxígeno a altas presiones se usa como coadyuvante en el tratamiento de la osteorradionecrosis asegurando el éxito terapéutico.
El odontólogo es el profesional que deberá planificar el tratamiento de osteorradionecrosis, en áreas competentes a la profesión, dentro de un equipo multidisciplinar que participe de forma activa.
Con la ayuda de la Cámara Hiperbárica a más de 1,75 ATA el paciente conseguirá buenos resultados en el tratamiento gracias a la potencialidad de promover la angiogénesis y la formación osteoblástica, reparando así el tejido óseo.